Pasión sin límites: El DIM moviliza a miles de hinchas en su peregrinaje a Pereira

La pasión los desborda. El amor que sienten por la camiseta de su equipo supera cualquier rastro de razón. Todo lo que pasa aquí es guiado por el corazón. Por eso gritan con una intensidad delirante en las tribunas una canción que refleja su emoción.

“El medallo es un sentimiento/ No se explica, se lleva bien adentro/ Por eso te sigo a donde sea...”, dice el cántico que Yesid Fernández, un joven aficionado del cuadro rojo, y miles de hinchas más, cantan con una disciplina militar, como si fuera un ritual, cada vez que termina de sonar el himno de Antioquia.

Por estos días, Fernández siente como propio ese estribillo. Se identifica plenamente con él porque parece describir lo que pasa en su vida.

¿El motivo? La pasión que siente por el Medellín, cuadro del que es aficionado por herencia familiar, lo llevó a buscar la manera de viajar hasta Pereira este miércoles 21 de agosto para apoyar al equipo en el juego de vuelta de los octavos de final de la Copa Sudamericana contra Palestino de Chile, en duelo que se disputará a partir de las 7:30 p.m. en suelo risaraldense.

Debido a que la Alcaldía de Medellín tuvo que entregar el estadio Atanasio Girardot a la Fifa para ultimar detalles antes del inicio del Mundial Femenino Sub-20, que se disputará en el país entre el 31 de agosto y el 22 de septiembre, al DIM le tocó “exiliarse” para este duelo importante.

El Poderoso no superaba la fase de grupos de “la otra mitad de la gloria” desde hacía ocho años y, gracias al empate 2-2 que sacó de visitante, tiene serias opciones para avanzar a los cuartos de final en esta edición del torneo.

Por eso, Yesid pidió el día de la familia en la empresa en la que trabaja para tener la posibilidad de viajar. Lo hizo entregando la carta que Fidel, la mascota del DIM, publicó en Twitter (ver foto detalle). Lo mismo hicieron los miles de hinchas más del Rey de Corazones (se espera que sean 20.000), que decidieron unirse a la caravana que organizan desde el cuadro rojo para que sus aficionados acompañen al equipo desde la capital antioqueña, hasta el estadio Hernán Ramírez Villegas.

¿Cómo será el itinerario del día?

En una jornada maratónica, que empezará a las 9:00 a.m., cuando los buses que contrataron grupos de aficionados, por los cuales pagaron precios que oscilan entre los 100.000 y los 150.000 pesos por persona para garantizar su puesto tanto en la ida, como en la venida, se unan a carros particulares y motos en la Variante de Caldas.

La caravana, en la que se espera que haya parafernalias alusivas al equipo, así como que suenen pitos y cornetas mientras van bajando hacia La Pintada, para después doblar por Irra, tomar la vía que pasa por las afueras de municipios de Caldas y Risaralda, hasta llegar finalmente a la zona franca de Pereira, contará con acompañamiento de miembros de la Policía de Carreteras.

De acuerdo con la disposición logística que compartió el Medellín para el recorrido, se espera que lleguen a la capital risaraldense entre las 2:00 y las 3:00 p.m. Lo anterior, gracias a que la caravana no realizará paradas en el recorrido. Además, advirtieron que las vías por las que se realizará el trazado son exentas de pico y placa, por lo que piden que eviten desviarse.

Después de llegar a Pereira, los aficionados tendrán cerca de cuatro horas para recorrer la ciudad, antes de que inicie el encuentro del torneo continental. Luego de que finalice, se espera que la caravana haga el camino de retorno a Medellín y llegue en la madrugada.

“Esperamos regresar de Pereira a las 11 de la noche y llegar a la casa por ahí tipo tres de la mañana para madrugar a trabajar”, dijo Fernández con un tono sarcástico.

Esta vez, contrario a como lo hizo en la caravana que llevó a hinchas del cuadro rojo a la capital de Risaralda en abril de 2022, para el partido contra Inter de Porto Alegre, válido por la fase de grupos de la Copa Sudamericana, no viajará en su carro particular, sino que lo hará en un bus que contrató con otros amigos. Así, la gente del DIM demuestra, en definitiva, que para ellos el Medallo es un sentimiento que no se explica, pero se lleva bien adentro.