Miles de inmigrantes en EE. UU., incluidos al menos 1.100 colombianos, enfrentan incertidumbre debido a la suspensión de los programas de migración humanitaria “paroles” por parte de la administración Trump. Estos programas, implementados durante el gobierno de Biden, ofrecían permisos temporales de trabajo y residencia, pero la nueva medida bloquea tanto nuevas solicitudes como cambios a estatus más permanentes, como el asilo.
El programa de reunificación familiar, que permitió a colombianos y otros inmigrantes obtener visas para traer a sus familiares, también se ve afectado. Muchos beneficiarios colombianos, que recibieron invitaciones para iniciar trámites, ahora se enfrentan a la expiración de sus permisos a finales de 2025, lo que los pone en riesgo de deportación o ilegalidad.
El DHS justificó la suspensión por preocupaciones de fraude y seguridad, aunque no se espera que la medida sea revertida en el corto plazo.
Expertos y organizaciones migratorias han criticado la decisión, que deja a miles de personas sin opciones legales y expuestas a deportaciones.