“Nunca subestimen a un maestro de escuela”: Tim Walz, fórmula vicepresidencial de Kamala Harris, en convención Demócrata

En una noche cargada de emoción y expectativas, el gobernador de Minnesota, Tim Walz, aceptó oficialmente la nominación del Partido Demócrata como compañero de fórmula de Kamala Harris para la vicepresidencia de Estados Unidos. Durante el tercer día de su agenda, la Convención Demócrata reunió a miles de fervientes seguidores.

“Es el honor de mi vida aceptar su nominación como vicepresidente de Estados Unidos. Estamos aquí esta noche por una hermosa y sencilla razón. Amamos este país”, exclamó Walz en un discurso lleno de pasión y agradecimiento. La intervención del gobernador es uno de los momentos culminantes de la convención.

Walz, de 60 años, subió al escenario con su característico carisma, una sonrisa que lo hace conectar con los miles de seguidores y un mensaje claro sobre la visión demócrata para el futuro de Estados Unidos.

El gobernador enfatizó que, para los demócratas, la libertad significa mejorar las vidas de las personas y proteger sus derechos fundamentales. “Cuando los republicanos usan la palabra libertad lo que quieren decir es que el gobierno debería tener libertad de invadir el consultorio de tu médico, las corporaciones de contaminar el aire y el agua; y los bancos la libertad de aprovecharse de los clientes”, comentó. “Pero cuando los demócratas hablamos de libertad, nos referimos a la libertad de mejorar sus vidas y la de las personas que aman”, explicó Walz, diferenciando claramente su visión de la de sus oponentes políticos.

En su discurso también abordó su trayectoria y los valores que lo llevaron a la política. Recordó cómo su experiencia como educador lo inspiró a involucrarse en el servicio público. “Mis alumnos me inspiraron a entrar en la arena política, viendo en mí lo que esperaba inculcarles: un compromiso con el bien común”, señaló.

Esta conexión con la educación y el compromiso comunitario fue un tema recurrente durante su intervención, “nunca subestimen a un maestro de escuela pública”, dijo para garantizar su compromiso a mejorar las oportunidades para todos los estadounidenses.

Walz continúo el tono que han venido teniendo en la campaña demócrata con sátiras hacia Trump, “un líder no se pasa el día insultando a los demás ni mintiendo, un líder trabaja”, dijo.

En un momento particularmente conmovedor, habló sobre su familia, especialmente su hija Hope, que nació con la ayuda de tratamientos de fertilidad. Este tema personal se convirtió en un punto central de su discurso, en respuesta a las recientes propuestas republicanas que buscan limitar el acceso al aborto y los tratamientos reproductivos. “Les digo cómo comencé una familia porque es parte importante del punto central de esta elección: libertad”, afirmó Walz, contrastando la visión demócrata de libertad con las políticas que él considera restrictivas de los republicanos.

Se mostró definitivamente como un hombre familiar, un buen vecino, un “ciudadano del común”, además recordó su juventud cuando vivió en un pequeño pueblo de Nebraska, donde “todos se conocían con todos”. Walz, sin duda, le apunta a esa población rural del país que hoy es un centro de disputa con Trump. “Es una agenda que no sirve a nadie más que a los más ricos y a las voces más extremistas de nuestro país; una agenda que no hace nada por nuestros vecinos que más necesidades tienen”, dijo.

El discurso de Walz fue precedido por una breve introducción de su esposa, Gwen Walz, quien ha sido un pilar fundamental en su carrera política a nivel estatal durante casi dos décadas. Con Gwen describiendo a Tim como un líder comprometido con el servicio público y el bienestar de sus conciudadanos, se robó gran parte de la euforia del público.

La Convención Nacional Demócrata continuó con el apoyo del expresidente Bill Clinton, quien hizo una de sus raras apariciones en eventos políticos recientes para brindar su apoyo a la candidatura de Harris y Walz.

Clinton, que ha participado en numerosas convenciones demócratas a lo largo de su carrera, hizo una reflexión personal sobre la elección presidencial de 2024. “En 2024 tenemos una opción muy clara, me parece: Kamala Harris –que está para el pueblo– o el otro tipo que ha probado (...) que sólo está enfocado en él”, declaró Clinton, en alusión a Donald Trump.

El expresidente también aprovechó la ocasión para hacer una broma sobre su edad, diciendo: “Estoy muy viejo para rodeos. Hace dos días cumplí 78 años, el hombre más viejo de mi familia en cuatro generaciones. Y el único momento de vanidad personal que me quiero dar aquí es que sigo siendo más joven que Donald Trump”.

Con la elección presidencial programada para el 5 de noviembre, Walz y Harris se preparan para enfrentar a Donald Trump en una de las contiendas más reñidas y cruciales en la historia política reciente de Estados Unidos.