Colombia ha despertado este miércoles conmocionada por la noticia del hallazgo el día anterior de una fosa común con ocho cuerpos en el Guaviare, una región controlada por las disidencias de las FARC que dirige alias Iván Mordisco, grupo que rompió con las negociaciones de paz con el Gobierno. La Fiscalía confirmó que los cadáveres corresponden a los líderes religiosos y sociales que habían desaparecido en abril después de haber sido citados e interrogados por los guerrilleros, por la supuesta sospecha de que se creara otro grupo delincuencial en la zona a través de apoyo del ELN.