El colombiano Jorge Iván Agudelo nadó sin parar 11 horas en Estados Unidos

Ahora todo parece sencillo, pero la realidad es que el esfuerzo que Jorge Iván Agudelo hace en cada reto es extremo. Tanto que por momentos alcanza a pensar en desistir, pero no lo hace, no claudica y va hasta el límite para lograr sus metas.

No solo es el tema de su preparación y el deseo de cumplir un reto, sino el valor económico que le representa realizar cada una de estas hazañas. Por eso no tira la toalla.

Luego llega la recompensa, la felicidad y la satisfacción de lograr otro desafío.

Esta vez, el colombiano celebra que acaba de cruzar, nadando de sur a norte, el Lago Tahoe, ubicado en los estados de California y Nevada, en Estados Unidos, en una distancia de 35 kilómetros.

Esta nueva hazaña la completó en un tiempo de once horas y 10 minutos, bajo temperaturas que oscilaron entre los 13 y 16 grados Celsius, recorrido que tuvo que hacer sin traje de neopreno, por lo que estuvo sin protección, solo con su pantaloneta de baño.

El lago Tahoe se encuentra a 2.000 metros sobre el nivel del mar, que lo convierten en uno de los más bellos del mundo. “Cruzar el Lago Tahoe se convirtió en el nado más difícil de mi carrera deportiva, llevé mi cuerpo y mi mente a límites que yo ni siquiera conocía, pensé en retirarme durante algunas horas, y tuve que luchar con mi mente para no rendirme. Sabía todo lo que estaba en juego, aunque estás en un ambiente incontrolable, porque no sabes qué puede suceder (temperatura, lluvia, fauna, etc...). Pero tienes la confianza, fortaleza y fe que llegarás hasta la otra orilla”, narró Jorge Iván desde California, donde se recupera del esfuerzo que efectuó.

Y esto, dice Jorge Iván, se presentó porque hace unas semanas tuvo un esguince de tobillo izquierdo, por lo que no estaba al ciento por ciento de su condición física.

“Después de empezar el nado, más o menos en la tercera hora, empezó a molestarme y el dolor se fue intensificando al pasar las horas. Además, se me encalambró la pantorrilla derecha, prácticamente me quedé sin piernas la mayoría del nado y por eso lo terminé con los brazos”, resaltó el deportista.

Por ahora, se recupera del esfuerzo, pero la próxima semana espera retomar los entrenamientos para preparar sus próximos retos en el agua.

Aunque ha tocado algunas puertas, y ha buscado ayuda del Ministerio del Deporte colombiano para poder seguir entrenando y compitiendo, Jorge Iván no ha tenido suerte, algo que le preocupa ya que su deporte es bastante costoso. Solo para una prueba como la que acaba de hacer, requiere de un presupuesto de entre los 10.000 y 25.000 dólares, para contar con todo el staff (médico, entrenador) y la parte logística que incluye el alquiler de un barco acompañante. Su esfuerzo tiene gran valor.

Los nuevos retos de este deportista

En agosto estará nadando el canal de Santa Bárbara, para así poder completar la triple corona de California.

En septiembre realizará un recorrido en San Francisco y espera convertirse en el primer latinoamericano en completarlo con éxito. “Estoy muy emocionado porque esta ciudad me cambió la vida y me abrió sus puertas cuando, en el 2021, tuve que salir de Colombia porque recibí golpes y amenazas de muerte”, comentó desde Estados Unidos el deportista que no cuenta con el apoyo de ninguna entidad oficial del país.