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Las minas de oro que estaban bajo el mando de alias Horqueta, cabecilla del ELN en el Nordeste antioqueño, se volvieron el eje de una oleada de violencia que comenzó en Girardota el 7 de enero y que llevó a que en Amalfi se presente un aumento del 675% de los homicidios este año, incluidas dos masacres, la más reciente sucedida el pasado lunes.
La disputa por tener el control de estos yacimientos auríferos en las cuencas del río Porce generó una disputa a sangre y fuego en la que participan el ELN (estructura que históricamente ha tenido el control territorial), las disidencias del frente 36 de las Farc, el Clan del Golfo y una organización conocida como Libertadores del Nordeste, quienes serían los principales perpetradores de los asesinatos en la ruralidad de Amalfi.
Actualmente en este municipio del Nordeste antioqueño, ubicado a 147,4 kilómetros de Medellín, se contabilizan 31 asesinatos este año, una cifra alarmante si se tiene en cuenta que el año pasado, a la fecha, iban cuatro y al 31 de diciembre ocurrieron 14 muertes.
Los tres más recientes ocurrieron en la vereda Guayabita, cuando a las 11:30 a.m. del lunes hombres armados, vestidos de camuflados, ingresaron a una finca y dispararon contra tres de los trabajadores de este lugar, señalando a uno de ellos de pertenecer al Clan del Golfo, según los registros judiciales.
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El general (r) Luis Eduardo Martínez, secretario de Seguridad de Antioquia, explicó que “esto se debe a una confrontación de estructuras criminales. Pero continuamos trabajando por la disminución de homicidios”.
En este hecho fueron asesinados Leonel Antonio Álvarez López, de 61 años; Luis Fernando Amaya Bedoya, de 41; y Edinson Manuel Peñate Ricardo, de 39. Las autoridades investigan si este crimen fue perpetrado por integrantes de Libertadores del Nordeste, una de las estructuras que tienen más agudizada su ofensiva contra Clan del Golfo en este municipio, de acuerdo con los informes judiciales.
A estos tres casos se le suman otros dos ocurridos el pasado sábado en el sector Monos, cuando asesinaron a Édgar de Jesús Escudero Gómez, de 61 años, y Arismendi de Jesús Cifuentes Londoño, de 33 años. Con estos dos hechos se totalizan cinco asesinatos en tres días y seis en lo que va del mes.
El minuto cero de esta ola de violencia ocurrió el 7 de enero en una estación de combustible de Girardota, cuando hombres armados asesinaron a Patricia Orrego Barrios, de 43 años, quien era la compañera sentimental de Orlando Marín Gómez, alias Horqueta, jefe del frente Capitán Mauricio del ELN. Al parecer, la mujer estaba manejando un gran yacimiento aurífero que empezó a ser codiciado por estas organizaciones criminales, debido a la gran cantidad de oro que estaban sacando.
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Con la muerte de Orrego Barrios y como alias Horqueta permanece detenido en la cárcel La Picaleña, de Ibagué, de inmediato los actores criminales iniciaron una guerra que ha dejado una cantidad de muertos que recuerdan las peores épocas de la violencia en esta localidad.
Tanto así que de las cuatro masacres que se han contabilizado este año en Antioquia, dos han ocurrido en Amalfi. Además de la de este lunes, el pasado 25 de mayo en el sector de Matadero Viejo fueron asesinados Samanta Andrea Moreno Cuevas, de 22 años; Jhonatan Javier Cogollo Arrieta, de 29, y Jorge Eliécer Ospina Gómez, de 40.
Tan agudizada ha sido la violencia que el año pasado en Amalfi hubo seis meses sin asesinatos, mientras que en este 2024 cada mes han matado, como mínimo, a dos personas. El mes más violento de este año en esta localidad fue abril, en el que la violencia cobró la vida de ocho personas.
Esta violencia, originada por la fiebre del oro, convirtió a Amalfi en el tercer municipio con más asesinatos de Antioquia este año, solo superado por Remedios (Nordeste), con 38 muertos, y Medellín con 158, según la Policía.
El Nordeste antioqueño es la subregión que más ha incrementado los homicidios este año en Antioquia, de acuerdo con los registros de la Policía Nacional.
El año pasado iban 76 casos, mientras que este 2024 ya se contabilizan 131, con un incremento del 72,4%. Lo alarmante es que el año pasado, al 31 de diciembre, fueron 155 casos.
Si bien Amalfi es el de mayor aumento, atrás no se queda Vegachí, que pasó de un caso el año pasado a nueve en este 2024. Anorí registra 18 asesinatos, Cisneros dos, Remedios 38, San Roque cinco, Santo Domingo tres, Segovia 19, Yalí dos y Yolombó cuatro.
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