Denuncian que Mario Uribe, primo del expresidente Uribe vive en Apartamento de Don Berna

La directora de la Unidad de Víctimas alerta sobre la revictimización de quienes buscan reparación tras el conflicto

Lilia Solano, directora de la Unidad para las Víctimas, hizo pública una denuncia donde afirma que el exsenador Mario Uribe, primo del expresidente Álvaro Uribe Vélez vive en un apartamento que perteneció al reconocido comandante paramilitar Diego Fernando Murillo, alias Don Berna. Lo más delicado, es que este inmueble había sido destinado para la reparación de víctimas del conflicto, según lo confirmado este 1 de octubre.

«Este apartamento fue un negocio entre Don Berna y el exsenador Mario Uribe. Todavía él vive ahí, mientras miles de víctimas esperan su reparación», afirmó Solano.

Además de esto, la directora señaló que esta situación es solo una pequeña muestra de lo que ha ocurrido con los bienes de los exjefes de las desmovilizadas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), los cuales han terminado en manos de parapolíticos vinculados a la financiación de estos grupos.

Solano también dijo que, según declaraciones de Salvatore Mancuso y Don Berna, Mario Uribe había sido el financiador de grupos de autodefensas: «más tarde, él realiza este negocio sobre el apartamento y otros bienes», mencionó.

#EnDesarrollo Mario Uribe, primo del expresidente Álvaro Uribe, está viviendo en un apartamento del exjefe paramilitar alias ‘Don Berna’, en Medellín, que estaba destinado a la reparación de víctimas, confirmó Lilia Solano, directora de la Unidad de Víctimas quien pidió a la… pic.twitter.com/DkfqYPBgVc

— BluRadio Colombia (@BluRadioCo) October 1, 2024

Debe recordarse además que Mario Uribe, abogado de 61 años y presidente del Congreso colombiano entre 2001 y 2002, fue condenado en febrero de 2011 por la Corte Suprema de Justicia por «concierto para delinquir agravado». En ese entonces La Corte comprobó sus nexos con el Bloque Norte de las AUC, que favorecieron su llegada al Legislativo en las elecciones de 2002. Sin embargo, fue liberado en noviembre de 2012 tras cumplir parte de su condena.

La denuncia de Solano ha generado un nuevo debate sobre la impunidad y la falta de reparación a las víctimas del paramilitarismo en Colombia, mientras las autoridades investigan la situación de los bienes relacionados con exlíderes paramilitares y su vínculo con políticos.

Como dato adicional, recordó Solano que, el 28 de julio de 2004, ella vivió una de las situaciones más alarmantes de la historia reciente de Colombia, cuando los líderes paramilitares, incluidos Salvatore Mancuso, Ramón Isaza y Ernesto Báez, fueron recibidos en el Congreso de la República con aplausos de algunos senadores. Evento donde menciona, quedó evidenciado la existencia de la parapolítica en el país y el vínculo entre las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) y ciertos sectores del poder político.

Solano quien lo vivió porque en ese momento estuvo presente en el Congreso junto a otros defensores de Derechos Humanos como Iván Cepeda, decidieron continuar hasta el día de hoy su lucha por la justicia y la reparación.

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