¡De no creer! Un hombre mató a su hijo el día de su cumpleaños de un escopetazo

Imagen ilustrativa/ No corresponde al caso en mención.

Una tragedia familiar sin precedentes ha conmocionado a Corea del Sur. Un hombre identificado solo como Jo, de 64 años, asesinó a su hijo de 34 años con una escopeta de fabricación casera, en plena celebración del cumpleaños del agresor. El horrendo crimen ocurrió la noche del domingo en el hogar del hijo, en el distrito de Yeonsu de Incheon, al oeste de Seúl, y fue presenciado por la nuera y dos nietos de 9 y 5 años.

Según el diario local Dong-A Ilbo, durante la celebración familiar, el padre salió brevemente de la casa para regresar armado con la escopeta. Acto seguido, disparó dos veces contra su hijo, quien, pese a ser trasladado de urgencia a un hospital, falleció poco después a causa de las heridas.

El agresor huyó en su vehículo y fue detenido tres horas más tarde en una calle de Seúl. En su confesión, reveló a la policía que el crimen estuvo motivado por un profundo rencor hacia su hijo, a quien culpaba del divorcio familiar ocurrido dos décadas atrás.

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El hombre armó su propia escopeta con un video de Youtube

La investigación reveló detalles aún más perturbadores. El arma homicida era una especie de escopeta de cartuchos, fabricada con un tubo de acero de 40 centímetros y un mecanismo de disparo. El propio sospechoso confesó a las autoridades que aprendió a construirla utilizando tutoriales disponibles en YouTube, reabriendo el debate sobre la facilidad de acceso a información para fabricar armas en internet.

Además, Jo reveló que había instalado un artefacto explosivo casero en su propio hogar, en el distrito de Dobong de Seúl, programado para detonar el lunes al mediodía. La policía evacuó a 105 vecinos, desactivó la bomba –compuesta por 15 botellas de PET llenas de diluyente de pintura, con dispositivos de ignición y temporizadores– y encontró tubos de acero y municiones adicionales en su coche.

A pesar de no tener antecedentes penales, experiencia previa en la fabricación de armas, ni tratamiento psiquiátrico registrado, el agresor se ha negado a dar más detalles sobre sus motivaciones. Por ello, las autoridades han asignado un equipo de perfiladores criminales al caso para evaluar su estado psicológico y comprender la magnitud de su resentimiento.