Crisis en Bangladesh: el jefe del ejército se reunirá con líderes de las protestas tras la salida de la primera ministra y más de 300 muertos

El general Waker-Uz-Zaman, jefe del ejército de Bangladesh, se reunirá este martes con los líderes estudiantiles que fueron clave en las recientes manifestaciones que llevaron a la renuncia de la primera ministra Sheikh Hasina.

La reunión se produce un día después de que los manifestantes lograran la salida forzada de Hasina, quien gobernó durante 15 años. Posteriormente, las Fuerzas Armadas anunciaron que tomarían el control del gobierno.

Las manifestaciones, que comenzaron a principios de julio debido a los descontentos generados por el Gobierno de Hasina, terminaron en enfrentamientos entre civiles y militares con cifras que superan los 300 muertos y un gran número de heridos.

La violencia estalló cuando las fuerzas de seguridad intentaron sofocar las protestas, que se desencadenaron en respuesta a la reintroducción de un sistema de cuotas en el empleo público, lo que fue percibido como una medida injusta, pues beneficiaba a las personas más cercanas al régimen del Gobierno.

El general Waker-Uz-Zaman prometió la formación de un gobierno provisional y la reparación de todas las políticas injustas cometidas durante el régimen. Además, anunció que el toque de queda impuesto en el país sería levantado el martes, en un intento de restaurar la calma tras días de intensos enfrentamientos.

Nahid Islam, líder del movimiento estudiantil que inició las protestas, ha pedido que el economista y Premio Nobel de la Paz, Muhammad Yunus, sea quien encabece el nuevo gobierno interino.

Yunus, de 84 años, no ha respondido aún a dicha solicitud, pero expresó en una entrevista con el diario indio The Print que “la salida de Hasina representa una liberación para el país”.

Tras la huida de la dictadora, millones de bangladesíes se tomaron las calles de la capital, Daca, en un ambiente de celebración tras el anuncio de la dimisión de Hasina.

La residencia oficial de la exprimera ministra fue saqueada por manifestantes que celebraban lo que consideraban el fin de una era de opresión. Sin embargo, la represión continúo durante la tarde del lunes, y la policía reportó al menos 109 muertos el lunes debido a ataques contra aliados de Hasina.

En medio de la turbulencia, el presidente interino Shahabuddin ha ordenado la liberación de los detenidos de las protestas, así como de la exprimera ministra opositora Khaleda Zia, quien había estado encarcelada desde 2018 por corrupción.

El paradero de Sheikh Hasina aún es incierto. Informes de la prensa india sugieren que su helicóptero aterrizó en una base militar cerca de Nueva Delhi y que podría intentar trasladarse a Londres.

Sin embargo, el gobierno británico ha solicitado una investigación encabezada por la ONU sobre los niveles de violencia sin precedentes cometidos bajo su mandato, lo que podría complicar su acogida en el Reino Unido.