El escándalo de la ‘kiss cam’ que ha convertido el romance entre Andy Byron y Kristin Cabo en el chascarrillo estival preferido de los internautas ha alcanzado tal fuerza que el caso ya se conoce, no sin cierta mofa, como ‘Coldplaygate’. Uno de los temas que han puesto sobre la mesa ha sido el creciente miedo a hacer según qué cosas en público. No solo por pudor, sino por el pavor a ser grabados.