Han pasado por Japón, Corea del Sur y Londres, donde Tom Cruise apareció en el tejado del cine IMAX en el que se realizó el estreno. Pero la guinda la ponía Cannes. El equipo de Misión: Imposible. Sentencia final, el aparente cierre de una saga en la que Tom Cruise se embarcó hace tres décadas, se ha estrenado esta tarde en el festival de Cannes. No ha habido sorpresas, ni aviones en vuelo rasante, ni su protagonista ha aterrizado en paracaídas en la playa de la Croisette. El único efecto especial ha sido Cruise, el mejor truco del cine de acción actual.