Seis tiros acabaron con la vida de «trabuco»: oriundo de Santa Marta, vivía en Cisneros y era minero en Anorí

Foto para ilustrar la nota. Archivo: Minuto30

Una violenta ejecución con tintes de sicariato sacudió la tranquilidad del corregimiento de San Félix, Antioquia, en la noche del martes 4 de noviembre a las 10:38 p. m. La víctima fue un hombre conocido con el alias de «Trabuco», quien se dedicaba a la minería ilegal en el municipio de Anorí. El cuerpo fue hallado sin vida a un costado de la Vía Bello – San Pedro de los Milagros, a la altura del Kilómetro 3, en una cuneta de la zona verde.

El crimen se produjo cuando «Trabuco», oriundo de Santa Marta y residente en Cisneros, regresaba en su motocicleta junto a su pareja sentimental de un mirador en la parte alta de San Félix. Según testigos, fueron interceptados por dos sujetos en otra motocicleta. Los agresores obligaron a la víctima a detenerse y, en un detalle que indica una clara verificación, le ordenaron quitarse el casco.

Al parecer, «Trabuco» se percató de que no se trataba de un simple robo e intentó huir corriendo por la carretera. Fue inútil. El parrillero lo persiguió y le disparó en repetidas ocasiones, dejándolo sin signos vitales en la cuneta. El minero recibió seis impactos de bala: cuatro en el pecho y dos en la cara, confirmando la naturaleza profesional del ataque. El asesino huyó del lugar inmediatamente en la motocicleta junto a su cómplice.

La pareja de la víctima quedó en shock en la carretera con la moto tirada en el piso. Dos jóvenes que pasaban por el lugar, con destino al mirador, encontraron a la mujer en una crisis nerviosa. Inicialmente, ella les dijo que se trataba de un robo frustrado, lo que pudo haber sido una reacción instintiva al pánico o una forma de protegerse en el aislado y oscuro lugar.

Los jóvenes la asistieron, hallaron el cuerpo de «Trabuco» ya sin vida y ayudaron a asegurar la motocicleta y a dar aviso a las autoridades quienes llegaron al sitio media hora después del ataque.

Se especula como móvil del crimen un ajuste de cuentas relacionado con las actividades de minería ilegal o a un presunto hurto de un carro, en las que podría haber estado involucrado el hoy occiso.

La policía judicial ha iniciado las investigaciones para esclarecer los motivos del sicariato e identificar a los dos sujetos que se movilizaban en la motocicleta.

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