En uno de sus relatos, Virgilio Piñeira argumenta en clave poética que él ha aprendido a nadar en seco. Y es con esa imagen con la que el Macba nos convoca a una monografía de la videoartista y performer cubanoestadounidense Coco Fusco, también autora de varios libros sobre arte y performance. Tal y como se nos dice en el texto de sala, en este caso, las vidas e imaginarios de quienes sufrieron y sufren represión entretejen un recorrido audiovisual, performativo y documental de la Cuba posrevolucionaria. La muestra se abre con el vídeo de una plaza desierta. Si antaño fue escenario de diversas movilizaciones, ahora es una explanada de cemento con dos efigies de hierro y una bandera como principal reclamo.