Colombia aún no sale de la indignación por el intento de suplantación contra la marca colombiana Frisby en España. La copia de la que fue víctima la marca nacida en Pereira generó una ola de solidaridad que desencadenó en una oleada de imágenes creadas con inteligencia artificial, en una campaña conocida como “a-pollo a Frisby”.
Con este antecedente, ahora se conoció que el Jabón Rey también quiso ser copiado, esta vez por una marca autodenominada como “R+V”, propiedad de Estefanía Ganhofer, cuyo conjunto visual de letras se asemeja a la tradicional marca de jabones.
Leer también: Policía intervino por presencia de encapuchados en la U. Nacional y la UdeA, simultáneamente
Los dueños de la nueva marca intentaron registrarla ante la Superintendencia de Industria y Comercio, a lo que Jabón Rey reclamó argumentando que estaban usando el mismo color azul, el mismo diseño tridimensional y una línea gráfica similar a la suya.
“El elemento gráfico utilizado en la marca solicitada a registro es extremadamente idéntico a la marca tridimensional registrada por nuestro cliente (Gradezco, dueña de Jabón Rey), lo cual es objeto de protección”, informó la marca dueña de Jabón Rey.
Aunque los propietarios de “R+V” negaron estar copiando el producto, la superintendencia decidió a favor de Jabón Rey y negó el registro de la nueva marca.
Historia de Jabón Rey
El producto fue creado en 1948 en Cundinamarca por parte de Otoniel Rey, y hoy es propiedad de Gradezco Ltda.
Además de ser uno de los jabones más usados para lavar ropa, traperas y trapos, tiene una larga lista de usos “improvisados”, por ejemplo, para impregnar las ollas de los sancochos y que no se quemen, para bañar a las mascotas, para dejar brillante el cabello, para limpiar heridas y hasta para hacer peinados.