Cuando Grant Harrold (Airdrie, Escocia, 47 años) comenzó a trabajar como mayordomo para la familia real británica en 2004, la situación de la casa Windsor era muy distinta a la actual: Carlos de Inglaterra era entonces príncipe de Gales y aún no se había casado con Camila Parker Bowles, el príncipe Guillermo estaba en los primeros años de su relación con Kate Middleton y pocos se imaginaban que el joven Enrique un día abandonaría sus deberes reales. Harrold estuvo hasta 2011 al servicio del actual monarca británico en Highgrove y sobre esos siete años ha escrito en The Royal Butler: My Remarkable Life of Royal Service (Seven Dials), unas memorias que se publicarán el 28 de agosto. Para disgusto de muchos, el libro no desvela secretos o cotilleos de la realeza —ya hizo lo propio Enrique de Inglaterra en su biografía—, sino que cuenta la historia de un chico que deseaba formar parte de la realeza y que terminó trabajando para ella.

