Los camioneros apenas podían conciliar el sueño. En cualquier momento podían escuchar cómo rasgaban la tela de su vehículo para comprobar qué llevaba dentro y si escuchaban movimiento era que estaban vaciando el contenido. A los ladrones les valía todo: ropa de marca, bicicletas, ordenadores, televisores... hasta pistachos. La Guardia Civil ha dado por desmantelada una “importante organización” de loneros, así es como llaman a quienes roban la carga de los camiones, en las estaciones de servicio de Aragón, Cataluña y La Rioja. La A-2 y la AP-68 eran sus vías favoritas, según fuentes conocedoras de la investigación. Hay 26 personas detenidas y se han recuperado nueve toneladas de material, con un valor superior al millón y medio de euros. En total se les atribuyen 59 robos que habían causado una importante alarma en el sector del transporte.