La Administración de Donald Trump ha demandado este jueves a Nueva York por sus leyes santuario, que convierten a la ciudad en un refugio seguro para inmigrantes. El alcalde y candidato a la reelección en noviembre, Eric Adams, figura entre los demandados por la Casa Blanca, pese a que se salvó de ser juzgado por corrupción por ayudar al Gobierno federal en el programa de deportaciones masivas de extranjeros.