El Carmen de Viboral fue el invitado especial en la IV Fiesta de la Cerámica, “Manos que Crean”, realizada del 15 al 18 de mayo en el Centro Comercial Sandiego, en Medellín. El evento fue posible gracias a la alianza entre la Asociación de Productores de Loza de El Carmen de Viboral (APROLOZA), el centro comercial anfitrión y la Administración Municipal.
Durante los cuatro días del evento, doce talleres cerámicos del municipio compartieron con los visitantes una muestra representativa de sus piezas únicas, elaboradas completamente a mano. Además de exhibir sus creaciones, los artesanos carmelitanos transmitieron saberes, técnicas y expresiones tradicionales que han sido preservados por generaciones, consolidando a El Carmen de Viboral como referente nacional en la cerámica artesanal.
El alcalde del municipio, Hugo Jiménez Cuervo, destacó la relevancia de esta participación:
“Esta participación fue una oportunidad para proyectar nuestro potencial artesanal y turístico, y para visibilizar el trabajo de los talleres que, con esfuerzo y creatividad, mantienen viva nuestra tradición. Con acciones como esta seguimos cumpliendo el Plan Especial de Salvaguardia y reafirmando nuestro compromiso con la protección del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación”.
Por su parte, Marcela Ramírez Cardona, secretaria de Turismo y Desarrollo Económico, resaltó el valor de la presencia carmelitana en espacios culturales de proyección nacional:
“Nuestra presencia en la Fiesta de la Cerámica reafirmó el valor cultural que representa la cerámica para El Carmen de Viboral. Fue un espacio para acercar a más personas a nuestras raíces y al talento de nuestros artesanos. Seguiremos trabajando por la proyección nacional e internacional de nuestro patrimonio y por fortalecer los procesos productivos que hacen de la cerámica un motor de identidad y desarrollo para el municipio”.
La participación en este evento no solo fortaleció los canales de comercialización de los talleres cerámicos, sino que también abrió nuevas oportunidades de colaboración en torno al arte, el turismo cultural y la economía creativa. De esta manera, El Carmen de Viboral continúa consolidándose como un modelo de gestión cultural y un emblema del patrimonio colombiano.