Si el testimonio del martes de Casandra Ventura, de unas cinco horas, fue tan duro como revelador, hoy la exnovia y primera denunciante de Sean Combs ha vuelto a declarar en los juzgados de Nueva York. El miércoles, Emily Johnson, miembro de la fiscalía que acusa al cantante y empresario de cinco delitos, ha seguido preguntando a Ventura, embarazada de ocho meses y medio, durante otras casi seis horas. El testimonio de la actriz y cantante, que pasó una década al lado de Combs y fue víctima de los abusos de los que se le acusa, es fundamental para conocer el modus operandi de Combs, conocido como Puff Daddy o Diddy.