
En los escaparates de muchos bazares y pequeñas tiendas del centro de Benidorm y la conocida como zona guiri es habitual encontrar imanes con motivos de carácter sexual, camisetas de mensajes subidos de tono en inglés y español o un amplio surtido de suvenires como tazas y abridores que muestran más contenidos obscenos. Para muchos visitantes estos productos forman parte del “folclore” de unas vacaciones en España o son un reflejo de la esencia kitsch de la capital de la Costa Blanca; para otros, sin embargo, suponen un motivo de incomodidad e incluso de rechazo.