Asesinaron y embolsaron a dos taxistas en Medellín: ya van 101 casos desde 2021 en el Valle de Aburrá

Dos amigos taxistas desaparecieron el mismo día y los encontraron en envolturas con ocho horas de diferencia en el centro de Medellín y el corregimiento de San Cristóbal. Con ellos ya se superó el centenar de estas muertes macabras en todo el Valle de Aburrá en lo que va de esta década, una modalidad que este año las estructuras delincuenciales han llevado a uno de sus picos más altos.

Las víctimas fueron identificadas como Jhonatan Garivaldo Liberato, de 33 años, y Daniel Stiven Uribe Álvarez, de 29. Desde el viernes por la noche se dejó de saber de ellos y en la mañana del sábado encontraron sus taxis en la antigua vía al Mar, en el sector de Boquerón, con unos kilómetros de distancia.

En ambos carros estaban todos los documentos de estos conductores, los celulares dañados y hasta el dinero de su trabajo, pero no información de ellos. En uno de estos carros también encontraron algunas manchas de sangre.

Sus familiares no cesaron la búsqueda y sobre las 10:00 p.m. del sábado, en el deprimido de Villanueva, centro de Medellín, reportaron el hallazgo de un cadáver envuelto en papel chicle y bolsas. En un comienzo quedó como cuerpo sin identificar, pero luego de las labores forenses se confirmó que era Daniel Stiven.

El hallazgo de Jhonatan, inicialmente, lo hicieron los familiares, quienes recibieron una llamada anónima, diciéndoles que su cadáver lo habían dejado en la vía hacia San Pedro, a un lado de una quebrada vecina a la cárcel El Pedregal. Cuando ellos fueron y confirmaron que se trataba de él, por unos rasgos particulares entre las envolturas, informaron a las autoridades.

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La Policía y la Fiscalía hasta el momento no han emitido móviles sobre la desaparición y posterior asesinato de estos dos taxistas, que se convirtieron en las víctimas 100 y 101 de asesinatos y posterior abandono en bolsas, costales, sábanas, maletas y papel chicle que se registran en lo que va de esta década (2021-2030).

Lo que corresponde a este 2024 es el año que va encaminado a ser el de mayor aumento en esta modalidad de muerte, con 26 casos, la cifra más alta de estos cuatro años, incluso superando a 2022, cuando se registraban 24 casos, con corte a la fecha. En 2021 fueron 15 casos al 23 de septiembre y en 2023 iban 21.

Medellín es donde más casos han ocurrido, con 13, seguido por Bello con seis, Girardota con cinco y Copacabana con dos. En los demás municipios del Valle de Aburrá no se han contabilizado casos.

Uno de los hechos más macabros de esta racha ocurrió el pasado 22 de agosto, cuando en la autopista Norte, a la altura de la vereda Loma de los Ochoa, de Girardota, encontraron el cuerpo desmembrado y envuelto en bolsas de un hombre, el cual a la fecha no ha podido ser identificado porque lo quemaron con ácido para impedir saber de quién se trataba.

Bello intervino la Regional

Sobre este cadáver, el secretario de Seguridad de Bello, José Rolando Serrano, explicó que “si no fuera por las medidas que hemos tomado en la avenida Regional, ese cuerpo de Girardota nos lo hubieran dejado acá, no se meterían el viaje hasta por allá”.

A las medidas que se refiere el funcionario es a la implementación de ocho cámaras de seguridad en la avenida Regional Oriental Norte, el corredor donde desde su apertura el 20 de diciembre de 2021 dejaron 15 cadáveres en distintos contenedores. El último hallazgo fue el 7 de abril, cuando se registró la muerte de John Jairo Uribe Flórez, de 45 años. Desde entonces empezaron con varias medidas hasta la instalación de las cámaras que comenzaron a funcionar hace dos semanas.

“Luego de este caso empezamos a hacer pasos restringidos en esta zona entre las 10:00 p.m. y las 6:00 a.m., con cierres a un carril y la ubicación de agentes de tránsito, Policía y Ejército para garantizar la seguridad y evitar que se nos siguieran presentando estos casos”, dijo Serrano.

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Para la implementación de estas cámaras, cuatro fijas y cuatro con giro de 360 grados entre la estación Madera y la salida en la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (Ptar) Aguas Claras, se destinaron $800 millones, los cuales contaron con apoyo de la Federación Colombiana de Municipios.

Objetivos de esta modalidad

El encubrimiento de cadáveres en bolsas va en alza, contrario a lo que viene sucediendo con los homicidios que registran una reducción del 21,5% en el Valle de Aburrá, según la Policía Metropolitana.

El objetivo de abandonar estos cuerpos con estas características, según el experto forense y docente del tecnológico de Antioquia, Germán Antía, “es que el homicida gane tiempo para escapar. Buscan sitios en los que pueden disponer del cadáver sin dejar alertas de dónde pudieron ocurrir realmente los hechos”.

Destaca que en estos casos siempre hay de por medio una modalidad de tortura en la que se busca que la víctima, antes de morir, suministre información sobre un hecho en particular. En cuanto a estos dos taxistas, las autoridades investigan si algo así pudo suceder para que tuvieran esta muerte tan macabra.