Abuso infantil, matrimonios forzados y trata de personas: los oscuros detalles de la secta hallada en Yarumal

Migración Colombia confirmó que los nueve adultos pertenecientes a la secta judía ultraortodoxa Lev Tahor, que fueron encontrados en un hotel de Yarumal junto a 17 menores de edad, no cometieron ningún delito en territorio colombiano. Sin embargo, la entidad analiza su expulsión ante las alertas internacionales que pesan sobre esta comunidad, señalada por presuntos abusos y trata de menores en varios países.

El operativo, realizado por Migración Colombia, el Gaula Militar Oriente, el ICBF y otras autoridades, quedó registrado en videos, en los que se observa el momento en que las instituciones ingresan al hotel donde estaban las siete familias. Cinco de los menores, entre 1 y 14 años, tenían circular amarilla de Interpol en 196 países y algunos poseen nacionalidad estadounidense.

Según informó la directora de Migración Colombia, Gloria Arriero, sobre varios miembros del grupo existen advertencias de agencias homólogas en Guatemala y Estados Unidos por presuntos delitos contra menores, incluidas condenas previas a líderes por secuestro y explotación sexual infantil. Aunque en Colombia no se ha configurado ningún delito, la funcionaria afirmó que la decisión administrativa más probable será la expulsión.

Durante el operativo, los niños fueron encontrados llorando y visiblemente asustados. Posteriormente, fueron trasladados a las instalaciones de Migración Colombia en Medellín, donde permanecen bajo protección. “Nuestra prioridad es el bienestar de los niños. Todos se encuentran en buen estado de salud mientras se definen las medidas migratorias y de protección”, explicó Arriero.

Los adultos y menores ingresaron al país entre el 22 y el 23 de octubre procedentes de Nueva York. Las autoridades investigan si el grupo pretendía establecer una nueva base en Antioquia, como ha ocurrido en otros países de donde han sido expulsados. Se analiza una posible intención de alquilar una finca en el norte del departamento para recibir a más integrantes. El hotel donde permanecían operaba de manera irregular y no llevaba registros de ingreso de huéspedes.

Migración Colombia indicó que actualmente se adelantan los procedimientos internos para definir la expulsión de los nueve adultos, un proceso que requiere coordinación con autoridades internacionales y acompañamiento especial debido a la presencia de menores. También se están estableciendo rutas de retorno con los gobiernos de Canadá, Estados Unidos y Guatemala.

Este caso se suma a una larga lista de intervenciones contra Lev Tahor. Fundada en 1988 por el rabino Shlomo Helbrans, la comunidad ha sido investigada por denuncias de abuso infantil, matrimonios forzados, trata de personas y violencia psicológica. Tras su paso por Israel, Estados Unidos, Canadá, México y Guatemala, ha enfrentado expulsiones y procesos judiciales. En 2024, las autoridades guatemaltecas rescataron a 160 menores bajo su custodia.

La aparición del grupo en Yarumal generó preocupación entre las autoridades colombianas, quienes han reforzado la vigilancia para evitar posibles intentos de asentamiento clandestino. La Confederación de Comunidades Judías de Colombia rechazó su presencia en el país, afirmando que “sus prácticas y acciones delictivas son totalmente contrarias a la ley y a las tradiciones judías”.

El proceso de verificación y acompañamiento continúa, mientras las autoridades investigan si otros miembros de la secta podrían haber ingresado al país.